Día de tensión en el Parque Industrial y Pilar por conflicto laboral
El martes Procter & Gamble había despedido a 25 trabajadores por los “incidentes irracionales” y “actitudes ilegales” durante sus reclamos que llevan 14 días. Ayer por la mañana la empresa mantuvo un bloqueo en su planta pero por la tarde, tras una reunión en el Ministerio de Trabajo, decidió reincorporar al personal.
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| Las partes mantuvieron en el Ministerio de Trabajo de Pilar, donde se resolvió la reincorporación de los despedidos. |
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Trabajadores en la calle, otros atrapados durante ocho horas entre dos portones de acceso a la empresa por no querer firmar una declaración jurada, una gerencia que tilda a sus empleados de “irracionales” y una lista de despidos que ascendía a 25 y prometía aumentar con el correr de las horas.
Todo esta tensión se vivó ayer entre los empleados de Procter & Gamble (P&G) y la patronal de la firma, tensión que entró en un impass por la tarde luego de la reunión que las partes mantuvieron en el Ministerio de Trabajo de Pilar, donde se resolvió la reincorporación de los despedidos.
Desde hace 14 días los empleados agrupados en el Gremio de Jaboneros de P&G comenzaron a realizar asambleas y a mantener reuniones con la empresa por tres pedidos particulares.
El primero consiste en una equiparación en el bono de fin de año entre ellos y los empleados afiliados al Sindicato de Camioneros. En diciembre del año pasado los empleados enlistados en jaboneros recibieron un bono de cien pesos contra los 2 mil del gremio de Moyano.
El segundo pedido es por una suba del plus en las rotaciones que en algunas combinaciones representan una baja en los sueldos. Para la rotación 4 por 4 (días de trabajo por días de descanso) buscan un incremento del 12% actual a un 20%, y en la rotación 4 por 3 una suba del 10% al 12%. El tercer reclamo consiste en garantizarles el viaje de regreso a sus hogares a las madres en período de lactancia, que por salir una hora antes de los horarios estipulados por la empresa no cuenta con trasporte público.
Paro
Sin llegar a un acuerdo, los obreros se reunieron con representantes de la firma el pasado jueves, en lo que fue su primer encuentro en el Ministerio de Trabajo local, pero no consiguieron un entendimiento porque “la empresa no quiso arreglar nada”, señaló Edgardo Sosa, Delegado del Gremio de Jaboneros.
Tras esa reunión fallida y ante el pedido de P&G de “flexibilidad”, los obreros retomaron sus puestos de trabajo durante el pasado viernes desde las 12 horas pero a las 18 “los gerentes de cada módulo llamaron a los obreros porque la gerencia iba a dar información”.
“Nos tuvieron horas esperando y lo único que nos dijeron es que el problema era lamentable”, contó Fernando Cabrera, empleado con una antigüedad de 7 años en diálogo con Pilar de Todos, que ayer estuvo durante horas en la puerta de la planta de P&G en el Parque Industrial.
Con la medida de fuerza vigente, el martes se realizó una asamblea general con empleados de los tres turnos en el sector de ingreso a la planta y desde ese momento la firma mantuvo sus portones cerrados, prohibiendo el ingreso de los obreros.
“La empresa cerró el portón y nos dejó afuera sin saber en que iba a terminar la asamblea”, relató Sosa.
Ayer los trabajadores siguieron con el paro en la entrada de la Calle 9 al 4225, mientras que los que quisieron entrar debían firmar una declaración jurada en la que los trabajadores se comprometían a “ingresar al establecimiento a prestar tareas efectivas, en orden al interés de no continuar en la situación de paralización vigente”.
“Nos dijeron que si no firmábamos la declaración jurada no podíamos entrar y si nos íbamos, nos teníamos que considerar despedidos”, contó Florencia Silva, embarazada de 6 meses, que cumplió su horario laboral entre dos portones sin acceso a un baño, agua o un asiento.
“Me sentí privada de mi libertad”, denunció la mujer embarazada, quién detalló que estuvo en un sector al aire libre encerrada entre un portón que llevaba candado y una entrada con molinetes custodiada por personal de seguridad de la firma.
Principio de acuerdo
Tras días de tensión, los trabajadores de P&G volvieron a reunirse ayer en el Ministerio de Trabajo donde obtuvieron la conciliación obligatoria, tras manifestarse y cortar calles céntricas de Pilar.
“Estamos esperando la resolución oficial pero es un hecho que el Ministerio va a decretar la conciliación obligatoria y reincorporarán a los 25 despedidos”, señaló Sosa ayer por la tarde.
Además, el delegado detalló que “a algunos trabajadores la empresa ya les informó que vuelvan a trabajar”.
En cuanto a los reclamos de los obreros, Sosa agregó que por ahora volverán a sus puestos de trabajo y que más adelante verán cómo continua su lucha. “Nosotros priorizamos la reincorporación de las 25 personas que despidieron, después vamos a ver como seguimos”, finalizó.
María Florencia Sain |
