Polémica por el cierre de una calle en un barrio de Pilar: “Hay que escuchar al 95% de los vecinos que estuvieron de acuerdo en cerrarla”

Así defendió el ex concejal y actual presidente de la sociedad de fomento del Barrio Mirasoles, Roberto Fernández, a la colocación de un portón en la vía pública para frenar la ola de inseguridad. La maniobra no cuenta con la autorización del Concejo Deliberante, pero los habitantes aducen que “es necesario adelantarse a los hechos”. Hay otro grupo que se queja por la obstrucción de la arteria.

Los vecinos del barrio Mirasoles de Pilar se mantienen firmes tras haber cerrado una de las principales arterias. (Foto Diario Regional)

Los vecinos del barrio Mirasoles de Pilar, ubicado a la altura del Km 50 de Panamericana, se mantienen firmes tras haber cerrado una de las principales arterias con un portón con candado, medida que tomaron debido a los sucesivos hechos de inseguridad que, dicen, vivieron durante las últimas semanas.
Al mismo tiempo, crecen las quejas de los que viven fuera de ese barrio que ahora deben buscar un camino alternativo para transitar.
El cierre de la arteria Chillán aún no cuenta con la autorización del Concejo Deliberante y según el  presidente de la Sociedad de Fomento del barrio y ex concejal de Pilar, Roberto Fernández, ya se está iniciando un expediente para que sea tratado en la sesión.
Fernández, en diálogo con Pilar de Todos, defendió el cierre de la calle y aseguró que no pueden esperar los tiempos formales del HCD. “La delincuencia viaja más rápido que todos nosotros y por eso es necesario adelantarse a los hechos”, señaló.
Asimismo criticó a los vecinos que se quejan por la obstrucción de la calle y aclaró que “hay que escuchar al 95% de la gente que estuvo de acuerdo en cerrar”.
“Los que pasan por esta calle, los podes contar con los dedos de una mano, además sólo tienen que dar una vuelta manzana. Están siendo fogoneados por alguien”, sentenció Fernández.
El portón con candado fue colocado sobre la calle Chillán y para ello hubo una consulta realizada a los vecinos de los barrios Mirasoles, Santa María y Las Nazarenas. Según estimó Fernández, en unas dos semanas estaría llegando un expediente con el pedido formal al Concejo.