Pilar presente en la apertura de sesiones ordinarias del Congreso de la Nación

Hubo caravanas de la JP, de Causa Peronista, del Movimiento Evita y de la Mesa Kirchnerista. Cristina desmintió que intente una reforma de la Constitución para ser reelecta y hasta puso en duda su postulación para este año. Aseguró que bajó el delito.

Al inaugurar las sesiones ordinarias por cuarta vez en su mandato, la presidenta Cristina Fernández de Kirchner insistió en que bajó el delito en el país.

Caravanas pilarenses de la Juventud Peronista, de la agrupación Causa Peronista, del Movimiento Evita y de diferentes agrupaciones que integran la mesa K local estuvieron presentes ayer en el acto de apertura de sesiones ordinarias del Congreso de la Nación, a cargo de la Presidente Cristina Fernández de Kirchner.
“Vamos a darle nuestro apoyo para seguir profundizando el modelo”, señaló el titular de la JP de Pilar, Damián Espíndola.
Juan Luna, del Movimiento Evita, por su parte destacó alguna de las medidas anunciadas por Cristina, como la lucha contra el trabajo esclavo o la implementación de la Asignación Universal por Hijo desde el 3er. mes de embarazo.
 “Son medidas que van en una misma dirección: incluir dentro de un modelo social y popular cada vez a más gente”, destacó Luna.
En su discurso, Cristina negó que haya un intento de modificar la Constitución para permitir la reelección “eterna” de la primera mandataria, e incluso puso en duda su candidatura para este año. “Alguna vez me escucharon a mí decir que voy por la reelección?”, preguntó Cristina, para añadir después que eso es algo que en su momento decidirá la gente sin imposiciones.
Sin embargo, Luna El líder del Movimiento Evita de Pilar, no tomó esas palabras como un retroceso en las intenciones de la Presidente en ir por un nuevo período, que no necesitaría, al tratarse del primero, de una reforma de la Carta Magna.
“No creemos que haya dicho que no iba a ser candidata, sino que eso es algo que todavía no preocupa y que se va a hablar más adelante”, enfatizó.
Diego Vivas, de Causa Peronista, expuso que “es necesario seguir trabajando en una misma dirección para no frenar el crecimiento del país, y que ese camino es el de Cristina Kirchner”.
“Estamos convencidos de que Cristina va a ser la candidata. Nadie mejor que ella para continuar interpretando y aplicando el modelo que nació con Néstor (Kirchner) y que le ha devuelto las esperanzas a tanta gente”, señaló el dirigente.
 
Cristina en el Congreso
Al inaugurar las sesiones ordinarias por cuarta vez en su mandato, la presidenta Cristina Fernández de Kirchner insistió en que bajó el delito en el país y respaldó a la ministra de Seguridad, Nilda Garré, quien había desatado una polémica apenas dos semanas atrás. Lo hizo en base a cifras de 2002 con 2008 sobre delitos dolosos. También destacó los avances en materia educativa, criticó los paros en Aerolíneas Argentinas y en los trenes, y le reclamó al Congreso que debata la Ley Penal Tributaria para "que vayan presos los evasores". Pese a los rumores, negó que vaya a avanzar con una reforma constitucional y advirtió que todavía no es candidata. Pero no hubo anuncios sorpresivos.
La Presidenta llegó poco antes del mediodía al Congreso. Luego de llegar en auto y con escolta oficial desde la Casa Rosada, la mandataria saludo a los titulares del Parlamento: al vicepresidente Julio Cobos –presidente provisional del Senado- con la mano y los presidentes del Senado, José Pampuro, y Diputados, Eduardo Fellner, también con un beso.
Ocho minutos antes de lo previsto, a las 11:52, arrancó su discurso con elogios a la gestión de Néstor Kirchner –a quien varias veces se refirió sin nombrarlo- y un repaso detallado de los logros económicos de la suya. "Ya no estamos en una etapa de construcción sino en una etapa de construcción de certezas. Hemos completado el crecimiento económico con inclusión social más importante de nuestros 200 años de historia", sostuvo Cristina al inaugurar las sesiones ordinarias. Y destacó el crecimiento de la economía del 9,1% durante el año pasado "superando la crisis mundial más importante de la que se tenga memoria".
Además, dijo que se concluyó "la etapa del desendeudamiento más importante que tenga memoria la Argentina". En ese momento tomó por primera vez sus anteojos y enumeró varias cifras.
Otro de los logros que destacó de su gestión fue el crecimiento de las reservas del Banco Central. "El crecimiento de nuestras reservas tuvo un promedio de 11,8 por ciento entre 2003 y 2010, lo que nos llevó a batir récords; sin embargo su récord histórico lo tuvo en 2010 con el 13,4 por ciento, al alcanzar los 52.350 millones de pesos", dijo la mandataria en su mensaje ante la Asamblea Legislativa.
Cristina elogió el aumento de la recaudación en más de 100 mil millones de dólares, aunque advirtió que "resta un desafío que es vencer a la evasión fiscal". "Por eso una de las cosas que le pido al Parlamento es que trate la ley Penal Tributaria para que vayan presos los que evadan impuestos".
En ese primer tramo de su discurso, cargado de estadísticas oficiales, advirtió que es necesario "orientar el crédito para sostener la inversión y el crecimiento", destacó el crecimiento del consumo con tarjetas de crédito, la fabricación de LCD y celulares en el país, y la generación de 5 millones de puestos de trabajo. En ese marco, advirtió: "No vamos a someternos a presiones que modifiquen el modelo".
En materia de Educación, destacó la construcción de 1.097 escuelas y el presupuesto asignado. "Se destinó el 6.47% del PBI a la educación publica, esto significó el mejoramiento de los salariales docentes y la construcción de universidades y escuelas", dijo. También destacó la distribución de notebooks en todo el país. "Las excusas se han terminado, es necesario dar el salto cualitativo", enfatizó.
Sorpresivamente, Cristina criticó los tironeos sindicales dentro de Aerolíneas Argentinas y los sucesivos paros, aunque luego amplió el mensaje a los gremios de todos los medios de comunicación: "No pueden someter de rehenes a usuarios y consumidores, quiero seguir siendo compañera de los compañeros de los sindicatos y no cómplice de maniobras que perjudican a otros trabajadores".
No obstante, la jefa de Estado defendió la reestatización de Aerolíneas Argentinas y dijo que el proceso de privatización de los '90 significó un ingreso neto de 27.000 millones de dólares "que es la misma cifra que significó el precio diferencial de la soja entre 2003 y 2010". "Una vez más convoco a los trabajadores a que defendamos el proyecto y el modelo", cerró.
Al promediar su discurso, Cristina anunció que decidió extender los beneficios de la Asignación Universal por Hijo (AUH) "a todas las mujeres embarazadas" a partir del 1 de mayo.
Sobre la Seguridad, dijo que "es un valor que no puede estar sometido a tironeos infantiles". "La seguridad no debe tener ideología ni utilización mediática con fines electorales", agregó, luego de lo cual destacó cifras de homicidios entre 2002 y 2008 y respaldó a la ministra de Seguridad Nilda Garré, quien hace pocos días aseguró que hubo un descenso de los índices de criminalidad en la provincia de Buenos Aires.
En ese marco, confirmó que en los próximos días se anunciará una restructuración de la Policía Federal, para que "haya más gente en calles y en las comisarías y menos en el sector administración", y que el trámite del pasaporte quedará en manos del Registro Nacional de la Personas.
Sobre el último tramo del discurso, llegaron las definiciones políticas más contundentes. "Si no he podido lograr que me aprueben el presupuesto, alguien me puede decir cómo voy a aprobar una reforma constitucional, hay algunos titulares que dan risas", advirtió sobre rumores de impulsar una reforma de la Constitución luego de las elecciones de octubre para permitir la reelección indefinida. Además, advirtió que todavía no es candidata. "¿Alguno me escucho decir que voy a ir a la reelección en 2011?", se preguntó.
Antes de dejar el recinto, volvió a retar en público al vicepresidente Julio Cobos, "pídale a su gente que se quede más tranquila", y anunció el envío al Congreso de una ley de propiedad de la tierra y una nueva ley de adopción. Nuevamente volvieron a llover papelitos blancos desde los balcones.