miércoles 22, septiembre 2010

El uniformado tenía 22 años

Por amenazas, familia de policía asesinado en Alberti se fue de Pilar

Allegados a Diego D’Andreis, un Federal baleado en un intento de robo a principios de agosto, eran intimidados por personas de la zona en donde ocurrió el hecho. Por miedo a que ocurra otra tragedia, todos se fueron al interior del país. Queda un detenido por la causa, ya que otro apareció ahorcado en su celda.

Según los relatos de los familiares del joven que vieron todo lo sucedido, el policía fue abordado por dos delincuentes que lo sorprendieron cuando iba a cerrar el portón de su domicilio.

Familiares de Diego D´ Andreis, policía Federal asesinado a principios de agosto en Alberti, en un intento de robo, tuvieron que abandonar Pilar y refugiarse en el interior de país.
Amedrentados por permanentes amenazas de “personas de la zona” en donde ocurrió el hecho, y ante el profundo temor de que se tenga que vivir otra tragedia, los tíos, abuela y sobrinos de joven uniformado, fueron casi que obligados a tener que dejar Pilar.
En medio de un profundo hermetismo, familiares, que también se sienten víctimas de esta situación, pidieron que no se revelara el lugar el que se mudaron, por temor a que las amenazas vuelvan.
Al ser consultados respecto de dónde provenían las intimidaciones, y cuál era el tenor de esas amenazas, sólo se remitieron a señalar que venían “de gente de una banda de la zona”, sin dar más detalles.
Siempre se creyó que los asesinos de D’Andreis son del barrio, e incluso las personas detenidas eran de Alberti.

El asesinato
El asesinato de D’ Andreis ocurrió en la intersección de las calles Los Caldenes y Formosa, cuando Diego fue interceptado cuando legaba a su casa, e intentaba ingresar el auto, un Ford K.
Según los relatos de los familiares del joven que vieron todo lo sucedido, el policía fue abordado por dos delincuentes que lo sorprendieron cuando iba a cerrar el portón de su domicilio luego de haber ingresado el automóvil.
Allí, lo abordaron para sustraerle el vehículo y le dispararon dos tiros, uno dio en el abdomen y otro en el pecho, en su momento los investigadores presumieron que lo atacaron luego de advertir que D´Andreis era policía ya que en ese momento vestía el uniforme.
Tras herirlo de muerte, los delincuentes le sacaron el arma reglamentaria, las llaves del auto y un teléfono celular. Luego se fueron corriendo.
Al instante, los familiares del joven llamaron a la policía que llegó de inmediato. Subieron al chico al patrullero y lo trasladaron hasta el Hospital de Trauma de Malvinas Argentinas. Tras agonizar varias horas, el joven murió.
Mientras tanto, horas después del crimen, la Policía detuvo a dos sospechosos de haber participado en el hecho. Uno de ellos, Sergio Gauna, apareció ahorcado en su celda, mientras que el segundo, Orlando Monzón sigue detenido.





 
 
 
 
 
 
 



 
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