Desembarcan el 10 de diciembre

Tras idas y vueltas comienza a quedar armada la nueva conformación del Concejo Deliberante

Del oficialismo jurarán Carmen Zúccaro, Miguel Saric, Alberto Zapata, Liliana Alfaya y Walter Roldán. Pero no se sabe si la esposa del intendente cumplirá el mandato y podría moverse el tablero. Por Unión Pro asumirán Noemí Barrio, Sixto De Santo, Noemí Barrio y Gustavo Trindade. Maniobras de último momento dejaron afuera a Marcos Aguirre.

Finalmente, tras idas y vueltas y confirmaciones que no llegaban, el telón ya comenzó a correrse y deja ver el escenario que presentará el Concejo Deliberante a partir del año que viene, aunque todavía el decorado podría sufrir algunas modificaciones.
Por el oficialismo jurarán el próximo jueves 10 de diciembre Carmen Zúccaro, Miguel Saric, Alberto Zapata, Liliana Alfaya y Walter Roldán. Sin embargo, todavía hay dudas. Es que si bien la esposa del intendente y titular de la Secretaría de Educación va a asumir, varias voces sostienen que pedirá una licencia desde abril del año que viene (cuando comience el período de sesiones ordinarias), para retornar al área educativa. De suceder, asumiría en ese momento Cristina Gómez. Pero no sería la única modificación que podría sufrir el bloque Z en el corto plazo. José Iacurto, quien estaba 6to. en la lista, podría dimitir en los próximos meses por cuestiones de salud, lo que le dejaría su lugar al titular del sindicato de Camioneros Oscar Larramendi, siempre y cuando Carmen Zúccaro también haya dado un paso al costado.
Pero el oficialismo, además de definir sus nombres de manera definitiva, también enfrenta una situación delicada. La de buscar una persona que logre mantener la hasta ahora endeble unidad de bloque, un rol que podría llevar adelante Carmen Zúccaro, siempre y cuando se quede, claro. De no suceder, el otro nombre podría ser el de Marcelo Castillo, aunque tendría que dejar la presidencia del deliberativo o el de Marcelo Iglesias (ver aparte). Este último comenzó a tomar fuerza, no tanto porque su imagen genere la unidad que el jefe comunal busca, sino porque no hay otro.

Desunión Pro
Por el lado de Unión Pro la situación es más compleja todavía. Es que roces internos que nunca pudieron aplacarse volvieron a darle una vuelta de tuerca más a la nómina de ediles que asumirán. Luego de la insólita catarata de renuncias que adoptaron varios miembros para que juren Gustavo Trindade y Marcos Aguirre, del felipismo y el denarvaismo respectivamente, a último momento uno de los que había dado un paso al costado, Sixto De Santo, se arrepintió y retiró su dimisión de la Junta Electoral.
Para muchos De Santo, hombre de confianza de Trindade, habría tomado tal determinación para perjudicar a Aguirre. Las causas nadie las sabe, pero por lo bajo suenan voces que señalan a “extraños manejos de fondos de campaña” como el detonante del distanciamiento.
Además de ellos dos, se sumarán por ese espacio Noemí Barrio y Silvana Aguilar, electas el 28 de junio, quienes deberían compartir bancada con los ya ediles Marcelo Criniti y Diego Ranieli, del macrismo y el denarvaismo respectivamente.
El sábado pasado hubo una reunión entre varios de ellos en un bar del KM 50, con el objeto de limar asperezas y llegar a un bloque unido, del que no formarían parte Trindade y De Santo, que inaugurarían una bancada felipista. Pero no sólo serían 2 los bloques. Podría haber 3 y hasta 4. Barrio, por un lado, y Aguilar, por el otro, han mostrado puertas adentro varias diferencias con Criniti y Ranieli, tampoco cuajarían en el espacio de Trindade y De Santo. “No es descabellado pensar en un bloque unipersonal, yo no soy de nadie, no me gusta el manoseo”, señaló Barrio en diálogo con Pilar de Todos.
El zuccarismo retendrá 12 bancas, mayoría simple pero no especial, mientras que la oposición, fragmentada, controlará las 8 restantes.