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Problemas de la vida moderna

Productos del hogar y contaminación ambiental, al tope de las  por intoxicación

Son las que más crecieron en los últimos años, y ya se ubican detrás del abuso de drogas, según un informe especial del servicio de Toxicología del hospital de Niños de La Plata elaborado a 40 años de su puesta en marcha. Las intoxicaciones masivas más importantes de las últimas décadas.

Las consultas por intoxicaciones producidas por contaminación ambiental y por productos del hogar -de limpieza y de higiene personal- han crecido sin pausa en los últimos años y ya ocupan los primeros lugares del ranking de toxicología detrás del abuso de drogas.   
 Se trata de una nueva tendencia que, en el caso ambiental, está ligada directamente a la vertiginosa evolución de las sociedades y al crecimiento industrial y tecnológico, mientras que respecto de los artículos de limpieza obedece a la mayor diversidad de productos que ofrece el mercado.
 Así lo indicó Ana María Girardelli, jefa del Servicio de Toxicología del hospital de Niños “Sor María Ludovica” de La Plata, que depende del Ministerio de Salud provincial. El área de Toxicología cumplió hoy, martes 6 de enero, 40 años de servicio a la comunidad.
 Con más de 18 mil consultas por año entre asesoramiento, atención de guardias (a menores de 15 años) y consultorios externos, este servicio es  centro de referencia en la provincia de Buenos Aires y uno de los más importantes a nivel nacional.
 En ocasión de celebrar las cuatro décadas de su puesta en marcha, los profesionales elaboraron un informe pormenorizado que pone de manifiesto los cambios que se produjeron en el tipo de consultas recibidas a lo largo de los años. 
 “Cuando nació el centro de toxicología se trataba a chicos que sufrían accidentes muy aislados, generalmente por contacto con algún químico. Hoy, esto sigue siendo parte del trabajo, pero las causas más relevantes son el abuso de drogas y medicamentos, la contaminación ambiental y los productos que se usan en el hogar”, sostuvo Girardelli.
 Así lo reflejan los datos elaborados por el Servicio de Toxicología del hospital: en consultorio externo, la causa de atención del 47,7 por ciento de los pacientes se debe a uso indebido de drogas; el 22,6 a situaciones de intoxicación relacionados a la contaminación ambiental; un 11,2 a causas accidentales (sobre todo chicos); y un 9 por ciento por cuestiones laborales.
 En cuanto a consultas en guardia por tipo de productos, la lista la encabezan los medicamentos con el 40,1 por ciento; siguen los plaguicidas con el 15,6; y los productos para el hogar con el 14,5; más abajo hidrocarburos con el 5 por ciento; gases tóxicos 2,6 entre otros. Si se suman todas las sustancias relacionadas a la contaminación del ambiente la cifra trepa al 28 por ciento del total de consultas.
 “Tradicionalmente se ha relacionado la Toxicología con cuadros accidentales y envenenamientos voluntarios o criminales. La realidad es más vasta y compleja. En los últimos años, en concordancia con cambios sociales, económicos y culturales predominan en todos los países problemas asociados específicamente a la exposición a agentes químicos, en su mayoría productos del crecimiento industrial y tecnológico” indicó la profesional y agregó que “todos, directa o indirectamente, estamos expuestos a la intoxicación por sustancias químicas”. 
En el país y en casi todos los lugares del mundo, los problemas por el uso de productos del hogar ocupan el segundo lugar. “En nuestra Provincia, por su fuerte actividad rural, son los plaguicidas los que ocupan ese puesto en la lista de sustancias tóxicas que ocasionan la consulta” precisó Girardelli.  
Entre los productos del hogar los más peligrosos por disponibilidad y accesibilidad son la lavandina y el detergente. Pero también se reciben muchas consultas por productos de higiene personal como desodorante, champú o jabón de tocador, y productos escolares  (pegamentos, témperas, tinta de útiles) y juguetes.
Cuatro décadas de servicio
El Servicio de Toxicología del Hospital de Niños de La Plata es Centro de Información, Asesoramiento y Asistencia Toxicológica (CIAAT) y Centro de Referencia Provincial en Toxicología desde 1996 (Resolución 341/96).
Sus ocho profesionales médicos y otros colaboradores, encabezados por Ana Giradelli, brindan asesoramiento, asistencia a pacientes, realizan investigación y docencia y prevención las 24 horas del día durante todos los días del año.
El servicio asesora en temas de toxicología a legisladores para elaborar leyes, a jueces y funcionarios del Ejecutivo provincial y nacional, a universidades, sindicatos, escuelas, colegios profesionales, entidades intermedias, municipios y a la comunidad en general.
En forma directa (por guardia) el servicio atiende a chicos menores de 15 años pero, a través de consultorio externo, a personas de todas las edades. El 30 por ciento de las consultas totales corresponden a mayores. A su vez, el 4 por ciento del total son consultas de otras provincias y países limítrofes.
Para contactarse con el servicio comunicarse al 0-800-222-9911 o al 0221-451-5555.

INTOXICACIONES MASIVAS:
Algunas de las intervenciones masivas más relevantes realizadas por el Servicio de Toxicología son:
-Contaminación intencional con Arsénico, en Olavarría (1987): Tras una situación delictiva en una carnicería donde ladrones arrojaron arsénico sobre carne que luego fue comercializada el servicio de Toxicología realizó diagnóstico, laboratorio, provisión de antídoto y tratamiento a los afectados. No hubo que lamentar víctimas.
-Intoxicación por jarabe de propóleo (1992): En distintos hospitales comenzaron a recibirse consultas extrañas que descolocaron a los médicos. Las tareas realizadas por el servicio de Toxicología y la Dirección de Epidemiología del Ministerio de Salud provincial concluyeron que lo único que tenían en común los afectados era que consumían productos con propóleo. El propóleo, del laboratorio Huilén, estaba adulterado. Hubo 900 personas intoxicadas por dietilenglicol presente en jarabe de Propóleo. 23 de ellas fallecieron.
-Adulteración de vinos “Mansero” y “Soy Cuyano” (1993). Los vinos “Soy Cuyano” y “Mansero” fueron adulterados con alcohol de quemar para abaratar costos. Hubo 27 afectados y 9 fallecidos.
-Intoxicación alimentaria por Bromato de Potasio, La Plata (1996). Chicos futbolistas de la liguilla de La Plata se intoxicaron con bromato de sodio que confundieron con sal durante un almuerzo. Hubo 186 chicos afectados. No se registraron muertos.
-Leche contaminada con producto químico en comedor escolar de La Plata (2002). Hubo 65 alumnos y 2 docentes afectados.
-Nube de gas cloro en Ensenada (2004). Se registraron 25 afectados, sin víctimas fatales

 

 

 
 
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