Duras acusaciones a una concesionaria que se lleva 4 millones de pesos al año
Zúccaro descarga artillería pesada contra la empresa de iluminación
Según el intendente la compañía se negó a aumentar el ritmo de las obras, por lo que decidió que en los dos primeros meses del año las nuevas luminarias las instale la comuna. “Si el contrato vencería mañana, Lesko no estaría más en Pilar”, atacó el mandatario local.
Visiblemente ofuscado, el intendente Humberto Zúccaro no dudó en descargar artillería pesada contra la empresa Lesko, firma que tiene en sus manos el servicio de iluminación pública en Pilar.
El enojo del jefe comunal nació cuando la firma se negó a aumentar el ritmo de instalación de nuevas luminarias —que según Zúccaro deber4ía haber pasado de 370 artefactos a los 500—, incremento que se financiaría con un aumento de la tasa de iluminación a grandes consumidores.
Sin embargo, Zúccaro informó que la empresa se negó a llegar a un acuerdo, por lo que, “por decisión unilateral”, el jefe comunal decidió que en los primeros dos meses del año todas las luces que se instalen en Pilar sean colocadas por cuadrillas municipales.
“En estos meses no tuvimos el aporte que correspondía por parte de Lesko. Me había comprometido a aumentar a los mayores contribuyentes la tasa de cinco pesos, como Parque Industrial o Clubes de Campo y por eso a partir del 1 de enero pedí 500 luminarias mensuales, pero no le convino al empresario y no se llegó a un acuerdo”, bramó Zúccaro, en una extensa entrevista que concedió al programa radial SOS Noticias, de Fm Plaza (92,1 Mhz).
El aumento al que hace referencia Zúccaro iba a ser tratado por el Concejo en la última sesión del año pasado, pero a último momento se decidió posponer el incremento que, en principio, treparía a los 12 pesos. Ahora, informó Zúccaro, la marcha atrás en la decisión se debió a que la empresa no habría estado dispuesta a ejecutar las obras pedidas por Zúccaro.
Ese flujo de dinero extra iba a servir para colocar luces en barrios estratégicos —sobre todo los que están siendo asfaltados—, sin tener que disminuir el pago de la deuda que la comuna mantiene con Lesko de unos dos millones de pesos.
“Falta de respeto”
El enojo de Zúccaro fue tal que dispuso un grupo de cuadrillas para que instalen las luminarias que prefirió no coloque Lesko (la firma cobra tras la presentación del certificado de obra), unos 370 artefactos por mes.
“Por decisión unilateral decidí no contar con Lesko y hacer los trabajos con empleados municipales y, sobre todo, adquiriendo las luces a través de donaciones. No voy a recibir al empresario de Lesko al menos hasta después de febrero, porque es una falta de respeto a la sociedad de Pilar lo que hicieron”, embistió nuevamente Zúccaro, contra una empresa que tiene contrato hasta el 2011 y se embolsa unos 4 millones de pesos anuales por los trabajos de instalación y mantenimiento de las luminarias en funcionamiento.“Esto es para los que dicen que ser privatista es más fácil que ser estatista, pero si el contrato con esta empresa vencería mañana Lesko no estaría más en Pilar”, sentenció Zúccaro.
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