Informe de la entidad
Para la Casa de Derechos Humanos, la pobreza en Pilar va a seguir aumentando
La entidad afirma que el problema aún no se discute en forma seria y que desde el gobierno no existen soluciones certeras. Aseguran que Pilar continua creciendo en forma desigual y destacan la proliferación de asentamientos precarios producto de migraciones.
Como todos los años, la Casa de Derechos Humanos de Pilar difundió un duro informe en el que se realizó un resumen sobre la actualidad de las políticas de Derechos Humanos, el cual no ha arrojado datos satisfactorios. Los puntos relevantes del informe están relacionados con la cantidad de derechos que en Pilar no se respetan. Durante el año pasado - según aclara el Padre Luis Guzmán - las diferentes estrategias políticas implementadas en Pilar “hicieron involucionar la política de Derechos Humanos por distintos acontecimientos y marcaron al 2006 como el año de la pobreza”.
En este sentido y alertados por la situación actual de la pobreza en el distrito, la entidad asegura que desde el gobierno “no existen políticas de fondo que puedan arrancar el problema de raíz y debido a esto, la pobreza va a seguir aumentando”.
En tanto, Guzmán aseguró que desde el municipio se mostraron movilizados por el tema cuando observaron las cifras oficiales del INDEC, difundidas el año pasado las cuales aseguraban que una de cada cuatro familias pilarenses posee sus Necesidades Básicas Insatisfechas. Sin embargo, al no poder brindar una respuesta concreta, “optaron por eludir el problema y evitar la discusión”.
Relevamiento
Teniendo en cuenta que el flagelo de la pobreza continua vigente en el distrito, la casa de Derechos Humanos se encargó de realizar, junto con otras Organizaciones no Gubernamentales, un relevamiento para monitorear de cerca el problema. Hasta el momento, se destacan la presencia de pequeños asentamientos de gente que provienen del interior y que se instalaron principalmente en los barrios Agustoni, Pinazo, y Fátima. Este fenómeno, según explicó Guzmán, “se produjo porque Pilar está vista como la ciudad donde hay trabajo, y donde hay un parque industrial gigante; eso provoca una gran migración de gente desde la provincia y desde el interior que busca oportunidades aquí y se instala en condiciones precarias”.
Es allí donde se advierte la paradoja pilarense en la que conviven expresiones de suma pobreza junto con las de gran crecimiento. En este sentido, Guzmán afirmó que desde el gobierno “La pobreza es una realidad que no se quiere asumir”.
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